En El Monaguillo creemos en lo natural y lo auténtico. Por eso, secamos el tomate de manera tradicional y lo convertimos en un ingrediente lleno de sabor y nutrientes que reúne propiedades saludables.
En El Monaguillo, la pasión por los productos naturales y saludables nos lleva a buscar siempre lo mejor de la tierra. Así como nuestros dátiles son sinónimo de dulzura natural y excelencia, hoy queremos acercarte a otro tesoro del campo mediterráneo: el tomate seco. Un alimento milenario, versátil y lleno de beneficios que, al igual que nuestros dátiles, combina lo mejor del sabor con la nutrición.
El tomate seco es el resultado de un proceso tradicional mediante el cual los tomates frescos, en su punto óptimo de maduración, son deshidratados lentamente al sol. Esto permite conservarlos por largos períodos sin necesidad de conservantes artificiales, concentrando su sabor, aroma y nutrientes.
El resultado es un alimento intenso, sabroso y de textura carnosa que ha sido apreciado durante siglos en la dieta mediterránea, sobre todo en regiones como Italia, España, Grecia y Túnez. Hoy, el tomate seco vive un renacer en la gastronomía moderna, y en El Monaguillo lo elaboramos cuidadosamente para que conserve todo su carácter artesanal y natural.
El tomate seco de El Monaguillo lo elaboramos exclusivamente en nuestras instalaciones de Túnez, una región con condiciones climáticas excepcionales para el secado natural. Allí, controlamos la calidad y trazabilidad del producto ya que secamos nosotros el tomate. Trabajamos en colaboración con pequeñas cooperativas agrícolas que mantienen vivas técnicas de cultivo y secado heredadas de generación en generación.
El proceso comienza con la siembra de variedades tradicionales, carnosas y con alto contenido en azúcares naturales. Cuando los tomates alcanzan su punto óptimo de maduración, son cosechados manualmente y llevados directamente al área de secado.
En Túnez, el proceso de secado se realiza totalmente al sol, de forma artesanal y sin ningún tipo de aditivo o conservante. Los pasos que se siguen para conseguir un resultado tan especial son los siguientes:
Este método, completamente natural y de bajo impacto ambiental, da como resultado un tomate seco con un sabor profundo, ligeramente dulce y salado, con una textura carnosa y flexible. En El Monaguillo nos aseguramos de que cada lote sea controlado cuidadosamente para garantizar higiene, calidad y respeto por el producto.
El tomate seco no solo es delicioso, sino también un concentrado de nutrientes. Al eliminar el agua, su contenido nutricional se vuelve más denso, destacando por:
Además, al estar deshidratado, el tomate seco se conserva durante meses sin necesidad de refrigeración, lo que lo convierte en un ingrediente práctico y nutritivo.
El tomate seco es un ingrediente versátil que puede enriquecer una gran variedad de platos. Algunas formas de incorporarlo pueden ser:
La pasta de dátil «El Monaguillo» es un producto natural y versátil que se ha convertido en un endulzante saludable y una excelente alternativa a los azúcares refinados.